Para garantizar el pago del alquiler muchos propietarios piden además de la fianza una garantía adicional. Sobre esto la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU), por la que se regulan los contratos de alquiler en España, determina que se puede solicitar un importe equivalente hasta dos meses de alquiler en concepto de garantía adicional.
Esta garantía sirve para resolver en caso que ocurran posibles impagos, desperfectos o siniestros que ocurran en la vivienda. La diferencia de la fianza es que la garantía adicional no se debe depositar en ningún lugar, la guarda el propietario y/o la agencia.
Al igual que la fianza se devuelve una vez finalizado el contrato de arrendamiento y transcurridos los 30 días que disponemos para revisar el piso. Si todo está correcto, se devuelve la cantidad junto con la fianza.